Notaría y compra de vivienda: qué trámites se pagan y quién los asume
Al comprar o vender una vivienda, los gastos de notaría son un aspecto fundamental que a menudo genera dudas. ¿Quién debe pagarlos, el comprador o el vendedor? ¿Cuánto cuestan y qué trámites incluyen? Entender estos costes y su reparto es clave para evitar sorpresas en la compraventa de un inmueble.
En este artículo, explicamos qué gastos notariales se generan en una compraventa de vivienda, cómo se reparten entre las partes y qué aspectos debes tener en cuenta para calcularlos correctamente.
1. ¿Qué son los gastos notariales en la compra de una vivienda?
Los gastos notariales son los honorarios que cobra el notario por la formalización de la escritura pública de compraventa. Se trata de un trámite obligatorio que garantiza la legalidad del acuerdo y su inscripción en el Registro de la Propiedad.
Estos gastos dependen de factores como el precio del inmueble, el número de copias de la escritura y los aranceles fijados por ley.
2. ¿Qué trámites incluyen los gastos de notaría?
Los notarios no solo formalizan la escritura de compraventa, sino que también realizan otros trámites esenciales en la operación:
Escritura pública de compraventa
Es el documento que formaliza la compraventa ante notario y es necesario para inscribir la propiedad en el Registro de la Propiedad.
Copias de la escritura
El comprador, el vendedor y el banco (en caso de hipoteca) pueden solicitar copias autorizadas de la escritura, lo que genera un coste adicional.
Asesoramiento legal
El notario verifica que el contrato cumple con la normativa legal y que ambas partes firman con pleno conocimiento de los términos del acuerdo.
Liquidación de impuestos
En algunos casos, los notarios pueden gestionar el pago de impuestos asociados a la compraventa, como el Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales (ITP) o el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados (IAJD).
3. ¿Quién paga los gastos de notaría en una compraventa?
La normativa española establece que los gastos de notaría pueden ser asumidos de diferentes maneras según lo pactado entre comprador y vendedor. Sin embargo, hay reglas generales que suelen aplicarse:
Costes asumidos por el comprador
- Escritura de compraventa: el comprador paga los gastos de la escritura pública porque es quien tiene interés en registrarla a su nombre.
- Registro de la Propiedad: también suele ser responsabilidad del comprador inscribir la vivienda en el Registro de la Propiedad.
- Gastos hipotecarios (si los hay): en caso de que la compra requiera una hipoteca, el comprador debe asumir los costes asociados a la formalización del préstamo.
Costes asumidos por el vendedor
- Gastos de cancelación de hipoteca: si la vivienda tiene una hipoteca pendiente, el vendedor debe pagar los gastos notariales para cancelar el préstamo.
- Plusvalía municipal: es un impuesto que debe pagar el vendedor y que se calcula en función del aumento de valor del suelo desde la última compraventa.
Casos en los que se pueden negociar los gastos
Aunque existe una distribución general de costes, comprador y vendedor pueden pactar quién asume ciertos gastos. En algunas operaciones, el vendedor puede aceptar pagar parte de los gastos notariales como incentivo para cerrar la venta.
4. ¿Cuánto cuestan los gastos notariales en la compra de una vivienda?
El coste de los gastos de notaría no es fijo, ya que depende del precio de la vivienda y de los aranceles establecidos por el Gobierno. A continuación, se presentan algunas estimaciones:
Gastos de escritura pública de compraventa
- Viviendas de hasta 100.000 € → 600 – 900 €
- Viviendas entre 100.000 y 250.000 € → 900 – 1.500 €
- Viviendas entre 250.000 y 500.000 € → 500 – 2.500 €
Gastos de inscripción en el Registro de la Propiedad
- Viviendas de hasta 100.000 € → 300 – 500 €
- Viviendas entre 100.000 y 250.000 € → 500 – 1.000 €
- Viviendas de más de 250.000 € → 000 – 2.000 €
Gastos de cancelación de hipoteca (si los hay)
- Entre 400 y 1.000 €, dependiendo del capital pendiente.
Estos costes son orientativos y pueden variar según la comunidad autónoma y el notario elegido.
5. Cómo reducir los gastos de notaría en una compraventa
Aunque los aranceles notariales están regulados por ley, hay formas de optimizar los costes:
- Comparar notarios: aunque los honorarios están regulados, algunos notarios pueden ofrecer descuentos en servicios adicionales.
- Solicitar solo las copias necesarias: reducir el número de copias de la escritura disminuye los costes.
- Negociar con el vendedor: en algunos casos, es posible pactar que el vendedor asuma parte de los gastos notariales.
- Consultar con el banco en caso de hipoteca: algunas entidades incluyen los costes notariales dentro de los gastos hipotecarios.
6. Lo más importante antes de firmar en la notaría
Antes de acudir a la notaría para la firma de la escritura de compraventa, es fundamental:
- Tener claro quién asume cada gasto: revisar el contrato para evitar malentendidos.
- Comprobar que el precio total reflejado en la escritura es correcto: cualquier error puede generar problemas legales o fiscales.
- Confirmar que la vivienda está libre de cargas: asegurarse de que no existen hipotecas, embargos o deudas asociadas.
- Consultar con el notario cualquier duda: es el profesional encargado de garantizar la legalidad de la operación.
Los gastos notariales son una parte fundamental de la compra de una vivienda, y conocer cómo se reparten entre comprador y vendedor puede ayudar a evitar costes inesperados. Aunque hay una normativa general que establece quién paga qué, en muchas operaciones los gastos pueden ser negociados.
Antes de cerrar la compraventa, es recomendable revisar los costes con el notario y asegurarse de que todo esté claro para ambas partes.